UNA BREVE HISTORIA DE LA CONTROVERSIA Preparada y presentada en mi debate con Ward Hogland en Pensacola, Florida, 1977.
1. Hace varios años atrás, se le presentó a la iglesia de Cristo en la avenida Highland de Abilene, Texas, (EEUU), la oportunidad de predicar el evangelio por una red de estaciones de radio. Este era la primera oportunidad de su índole presentado a la iglesia del Señor.
2. Por experiencia, estos hermanos supieron valorizar la prédica por radio. Sin embargo, también sabían que no podían llevar a caba un programa así de grande sin la ayuda económica de sus iglesias hermanas.
3. Firmaron el contrato e invitaron a otras congregaciones a ayudar con lo económico para que el evangelio fuera predicado por todos los Estados Unidos.
4. A poco tiempo algunos se opusieron a este programa. (Nota: Yo personalmente tuve conocimiento de una reunión especial, llevada a cabo en Abilene, Texas, con el propósito de tratar de formalizar la oposición). Este sistema, de invitar a otras congregaciones a ayudar, era la forma en que los esfuerzos más grandes de los 100 años anteriores habían sido logrados, y como numerosos programas de radio ya se habían llevado a cabo de esta manera, se les exigió a los que se oponían que expresaren sus razones.
5. Fue argumentado por muchos que este tipo de programa trataba de una necesidad a la cual muchas iglesias contribuía, y que esta situación sería paralelo a la Sociedad Misionera de las Iglesias Cristianas.
6. Yo, personalmente, señalé a estos hermanos que si por esto el programa de radio de Highland es incorrecto, entonces también sería incorrecto la manera de sostener a los orfanatorios porque depende de mismo sistema. Son situaciones donde las muchas iglesias pueden contribuir, y , sin embargo, siempre se ha sostenido de esta manera a los orfanatorios.
7. En vez de admitir que estaban equivocados en oponerse a este sistema, estos hermanos comenzaron una guerra sin reserva contra los orfanatorios.
8. Cuando los que oponían fueron obligados a reonocer que ellos no podían oponerse a este sistema sin también tener que oponerse a los orfanatorios, decidieron que la IGLESIA no tiene NINGUNA OBLIGACION con los huérfanos. Si la IGLESIA no tiene ninguna obligación con los huérfanos, entonces no hay ninguna necesidad de dialogar si una iglesia puede on no enviar fondos a un orfanatorio para cooperar con las necesidades de un huérfano.
9. Estos hermanos, en resultado de numerosos debates, no sólo decidieron que la iglesia no tiene ninguna obligación con los huérfanos, sino que la iglesia puede ayudar en los físico solamente a personas que sean cristianos. Yo, personalmente, he debatido con ellos este controversia en el estado de Florida.
10. En los años de 1950, ciertos hermanos empezaron a contender que, aunque una iglesia puede enviar fondos a otra iglesia en relación a necesidades físicas, una iglesia no puede enviarle dinero a otra iglesia en ralación a asuntos espirituales. Yo, personalmente, participé en un debate en Fort Smith, Arkansas, cuando Ward Hogland asumió esta posición. En aquél momento le señalamos que si una iglesia no puede enviarle fondos a otra iglesia en relación a asuntos espirituales, entonces una iglesia no podría enviarle un Nuevo Testamento a otra iglesia. (Nota: Esta era la posición de Ward Hogland en aquél entonces. Estaba equivocado y ahora reconoce que estaba equivocado.)
11. Unos pocos días después del debate en Fort Smith, tuvimos otro debate en Dallas, Texas. Nos preguntaron la misma pregunta que nos hicieron en Fort Smith, que si una iglesia puede enviar un Nuevo Testamento a otra iglesia. Nuestro contricante había escuchado las grabaciones del debate en Fort Smith, y no quiso que los atraparan en la posición que Hogland había tomado. Gritó, "Sí, una iglesia puede enviarle un Nueva Testamento a otra iglesia".
12. Le tuvimos otra pregunta en espera: ¿Puede una iglesia enviarle dinero a otra iglesia para comprar un Nuevo Testamento? Nuestro contrincante contestó que no. Por fin habíamos localizado el pecado. El pecado era el dinero. Puede enviar mercansía poer no el dinero.
13. Mientras el fundamento de la oposición siempre se ha cambiado, y mientras la oposición ha ofrecido numerosos argumentos, el pensamiento que resume la posición de la oposición es esta: MUCHOS CREEN QUE ES PECAMINOSO QUE UNA IGLESIA ENVIE DINERO A OTRA IGLESIA PARA PREDICAR EL EVANGELIO. Esta es la posición del Hno. Ward Hogland.
E. EL ANTI-ISMO DE HOY
En lo que conscierne (1) la cooperción de congregaciones y (2) la ayuda para huérfanos, el anti-ismo hoy sostiene los siguiente:
1. Puede haber ayuda de iglesia a iglesia en asuntos físicos;
2. Puede haber ayuda de iglesia a iglesia en asuntos esprituales que no tienen que ver con el dinero;
3. No puede haber ninguna ayuda de iglesia a iglesia en asuntos espirituales que tienen que ver con dinero;
4. En ayudar en asuntos espirituales que tienen que ver con dinero, una iglesia puede enviarle dinero directamente a un predicador;
5. La iglesia no tiene ninguna obligación con el huérfano;
6. El cristiano como individuo puede ayudar a un huérfano, pero la iglesia no puede ayudar a un huérfano;
7. Una iglesia puede ayudar en cuestiones de benevolencia física solamente a aquellas personas que son cristianas.