Serie Volver, Lección 8
¿Eres Feliz?
por Elmer N. Dunlap Rouse
¿Eres feliz? Si estás triste, no conoces a Jesús. En Juan 10:10 nuestros Señor nos explica que su misión era, precisamente, para hacernos felices:
10 El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.
Jesús no vino para quitarte algo, sino es todo lo contrario. Quiere darte algo. Vino a este mundo para darte una vida abundante ahora. No vino para darte una abundancia material ni hacerte rico, sino una abundancia mucho más importante, una vida espiritual. Vide espiritual es la vida de Dios. Más que una vida sin fin, es una calidad de vida que tiene Dios y tú lo puedes tener ahora. La vida física es corto y termina pero la vida de Dios es para siempre, donde no hace falta relojes ni lágrimas.
The Falling man es una fotografía tomada por Richard Drew el 11 de septiembre del 2001 a las 9:45, y muestra un hombre lanzándose al vacío de las torres gemelas durante el ataque a Nueva York. Es un foto inolvidable porque muestra en poco tiempo lo que a todos nosotros nos tarde un poco más, pero todos nosotros sabemos que vamos a morir.
Lo que somos y nuestro final es tan seguro que la mayoría de las personas no lo quieren pensar porque le quita todo la felicidad de lo que están haciendo. Prefieren distraerse con un video, un deporte, noticias, chismes de los vecinos, juegos electrónicos y mil cosas más para no pensar que el reloj de su corta vida está caminando y puede parar en cualquier momento. No llores la persona en el foto, porque esa persona eres tú.
Si nos obligamos a mirar lo que no queremos mirar, encontramos en las palabra arriba citados de Cristo una realidad que nos desprende de todo pensamiento material, dejando lo que realmente somos - entidades espirituales con la capacidad de vivir una vida que Cristo nos quiere enseñar.
¿Eres feliz?
Pablo dijo en 2 Corintios 7:10,
10 Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte.
Sólo Jesús te puede hacer feliz.
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