por Anitza Cox Marrero
Es imposible escribir en una simple hoja de papel todas las razones por las que yo sé que Dios me ama. Cada segundo que pasa en mi vida me hace creer más en él y estar más segura de que "desde allá arriba" él vela por mi.
Si miramos a nuestro alrededor, la misma naturaleza es testigo de ese amor que él nos tiene. ¿Quién sin alguien que nos ama nos daría unos regalos tan bellos como el murmullo del mar o el canto de un ave o el brillo del sol? ¿Quién sino él nos daría el regalo de cada nueva mañana o de simplemente el aroma de una rosa?
La vida no siempre es fácil ni todo es bello, pero si abrimos nuestro corazón a Cristo nos damos cuenta que cualquier sufrimiento puede superarse con un amigo como él a nuestro lado. En mi corta vida he pasado por momentos de desesperación y de dolor, pero siempre que estoy perdida o me siento en sombras, encuentro en la Biblia una luz que me guía en medio de la obscuridad. En ella siempre encuentro una palabra de aliento que me da la motivación que necesito para seguir adelante. No importa cuán difícil sea mi camino, siempre Dios me hace entender que debo seguir y que su hijo está conmigo.
¿Por qué yo sé que Dios me ama? Porque dejó que su hijo muriera por mí. Porque me dio vida, una familia, la Biblia y, además de todo esto, me dio la eternidad con El allá en el cielo. Hay muchas cosas en este mundo que no entiendo, pero de unas si estoy completamente segura y es que Dios me ama.
¿Dónde
se reune la iglesia de Cristo? |
