EVANGELISMO EN ACCION

por Elmer N. Dunlap

Lección 9

CONSERVANDO

INTRODUCCION

A. Predicar el evangelio a toda persona a nuestro alcance y bautizar a los que reciben el mensaje es sólo una obediencia parcial a la Gran Comisión de Jesucristo. NO PODEMOS LAVARNOS LAS MANOS y abandonar a los recién convertidos para que se defiendan como puedan. Son tan indefensos como recién nacidos. Cristo nos mandó a instruirlos y capacitarlos para ser miembros fieles, maduros, funcionales y reproductivos en su reino. Sin darles seguimiento, nuestra prédica fue en vano (Mat. 28:18-20; 1 Tes. 2:7, 11-12; Juan 5:14; Hech. 14:21-22; 20:20, 26-27; Col. 1:28; Heb. 5:13-14). El éxito del evangelismo no consiste en cuántos podemos bautizar, sino en cuántos podemos incorporar y asimilar.

B. El diablo ataca inmediatamente. No podemos dilatar en darles seguimiento ya que es un pecado muy feo convertir a las personas para luego abandonarlas. El diablo no cede la derrota. Usa tanto las viejas amistades y familiares para volver a ganarlas como también usa los mismos hermanos de la iglesia. Pues, los recién convertidos aprenden muy rápido los malos y dañinos hábitos de los miembros inmaturos e infieles, a pesar de los muchos años que llevan éstos en la iglesia. Pues, algunos hermanos son fríos, mundanos, abandonados en ofrendar y asistir, hipócritas, sueltos de lengua, opuestos a toda buena obra y no se puede contar con ellos para nada. El nuevo, a menos que se le indique que tal patrón es malo, va a degenerar e imitarlos en todo. Mas vale precaver que lamentar.

C. ¿Qué podemos hacer para conservar los que evangelizamos? Hace falta un programa de seguimiento, un proceso sistemático para que todos los recién convertidos reciban cuidado.

I. DEBER DEL EVANGELISTA

A. El cristiano que convierta a una persona no debe rápidamente a buscar otro para convertir. El refrán dice: "El que mucho abarca mucho, otro aprieta". La ambición de convertir a los muchos, puede llevar uno a descuidar a los recién convertidos. Es mejor convertir a pocos y conservarlos, que salir a lo loco a convertir a otros. Debemos ser estables y responsables con nuestros "hijos".

B. Si podemos organizar a los hermanos a adoptar a los nuevos y hacer que se sienten como parte de la iglesia, necesarios e importantes, entonces podemos encargarlos a éstos y dedicarnos a la conversión de otros. Pero si no existe o no funciona este sistema de apoyo, tendremos nosotros que limitarnos para darles el apoyo que necesitan.

II. DEBER DEL CONVERTIDO

A. Es obligación del recién convertido seguir creciendo y obedeciendo al Señor. Podemos preguntarle, "¿Deseas ser un cristiano obediente?" Es su responsabilidad ante Dios crecer y buscar la pura leche espiritual (1 Ped. 2:2). Es su deber orar, leer la Palabra y congregarse. Es su deber abstenerse de los deseos carnales que luchan contra el espíritu, limpiarse y sacar el cuerpo a aquellos que quieren regresarlo a su vida antigua. Es su deber asociarse con los hermanos, hacer nuevas amistades cristianas, perdonar ofensas, ofrendar, cooperar y aportar para el beneficio del cuerpo hasta donde su capacidad le permita.

III. EL DEBER DE LA IGLESIA

A. La iglesia deber ser funcional, sana y abrir hueco para estos nuevos hermanos que el Espíritu Santo ha añadido al cuerpo de Cristo que (1 Cor. 12:12-13). Son miembros de la familia de Dios con derechos de participar y contribuir a la obra del Señor.

B. La iglesia debe examinarse del punto de vista del nuevo, de como aparece a aquellos que vienen por primera vez. Estos no conocen a nadie y están preguntándose ¿cómo es la iglesia?, ¿amistosa o distante?, ¿calurosa y considerada o fria e hipócrita?. Si tú fueras a tu iglesia por primera vez, ¿qué pensaría de la iglesia? Cuando tú viniste a esta iglesia por primera vez, ¿qué te gustó más? ¿Quién fue la primera persona que llegaste a conocer? ¿Qué hicieron los hermanos para hacerte sentir bienvenido? ¿Qué hicieron que te hiciste sentir como no bienvenido? Si tú fueras a buscar a una iglesia donde reunirse, ¿cuáles factores serían importantes para tí? ¿Qué está haciendo esta iglesia para hacer que las visitas y nuevos miembros se sientan bien? ¿Qué hago personalmente para las visitas y nuevos miembros? ¿Es esta iglesia introvertida - orientado hacia las necesidades de los ya miembros - o extrovertida - orientada hacia las necesidades de los de afuera, los no miembros? Como Cristo vino a buscar y a salvar lo que se había perdido, es importantes guiar a la iglesia al propósito de salvar almas y no dejar que se convierta en un club social limitado al beneficio de unos pocos, sino al amor de Dios que abarca a todas sus criaturas.

C. Los miembros deben ser amistoso con el recién convertido.

1. Observa los saludos de Pablo en Romanos 16. Parece que era amigo íntimo de cada uno. Pero había un momento en la vida de Pablo, después de bautizarse en que no tenía a nadie por amigo, excepto sólo a Ananías. De no ser por Bernabé que lo introdujo a la familia de la fe en Jerusalén, es posible que Pablo se hubiera vuelto a su vieja vida por sentirse como sospecho, extraño y solo (Hech. 9:26; Gál. 2:9).

2. Flavil Yeakley comentó que el recién convertido que permanece en la iglesia formará de siete a nueve amistades durante su primer año en la iglesia. Pero los que se fueron de la iglesia solo lograron formar un promedio de dos amistades o menos durante su primer año de convertido (¿Por Qué Iglesias Crecen?, pág. 45).

3. No hay base en la Biblia para la idea sectaria de probatorio, es decir, un tiempo de prueba antes de aceptar a uno. No podemos asimilar a los nuevos si los tenemos aparte. Hay que aceptarlos con todas sus verrugas y desperfectos (¡los demás miembros también tienen sus verrugas!). "Sí, Juan tiene sus cosas, pero es perdonable porque es nuevo y lo más que tenemos es paciencia". Es como el bebé que vomitó encima de su padre. Pues no pasó nada ni cambió la amistad. Criar a un bebé requiere amor, tiempo, dinero, creatividad, compromiso e inconveniencia.

D. Una iglesia que cree en el evangelio busca oportunidades para saludar a los nuevos y hacerlos sentir como bienvenidos y cómodos en los cultos y clases de la iglesia. Les introduce a otros hermanos. Les busca himnario y Biblia, y no permite que se vayan después del culto sin un saludo amistoso y con la idea que los ama y son muy importantes. Hasta los invita a su casa para conocerlos mejor y compartir un rato.

E. La iglesia necesita proveer enseñanza propia para los recién convertidos. El material que interesa a los nuevos es aburrido para los miembros viejos, pero el material bueno para los viejos no contesta las preguntas elementales de los nuevos. El maestro tiene que saciar la necesidades de los dos grupos si van a compartir la misma clase. Y debe saber que los nuevos vienen con veinte mil preguntas. Un curso bíblico por correspondencia puede resolver parte de su hambre de información.

F. La iglesia ama a sus recién convertidos. Los ama primero que los recién convertidos puedan corresponder a su amor (1 Jn. 4:19). Son muy importantes (3 Jn. 4). No los queremos sólo para tener más y más membresía o más ofrenda, o más parejas lindas para acompañarnos, sino que nuestro deleite es servir y glorificar a Dios.

IV. PROGRAMA DE SEGUIMIENTO

A. Me gusta esta palabra programa, porque indica algo organizado. Si tu iglesia no tiene un programa de limpieza, ya sé que tu local está sucio. No se puede confiar en la ocurrencia o la suerte, sino hace falta la organización que garantiza que cada local esté limpio para el domingo y que cada recién convertido reciba seguimiento y apoyo sistemático.

B. Hace falta un encargado en coordinar el programa.

C. Materiales de Orientación

1. Un certificado de bautismo.

2. Carta de bienvenida firmado por los líderes de la iglesia.

3. Una lista de todas las actividades y organizaciones de la iglesia para que el nuevo miembro pueda indicar dónde quiere trabajar.

4. Solicitudes de publicaciones, como el Boletín, La Voz Eterna, El Expositor Espiritual. Puede pagar su subscripción por un año.

5. Si acaso no está actualmente tomando un curso bíblico por correspondencia, darle la primera lección de un curso bíblico.

6. El presupuesto de la iglesia.

7. Las direcciones de los miembros con sus teléfonos.

8. Averiguar si necesita una Biblia, si necesita transportación a los servicios o si tiene alguna pregunta.

D. Amigo de Apoyo

1. Es bueno asignarle un amigo de apoyo. Algunos le llaman, "guarda de mi hermano" (Gén. 4:9).

2. Un hermano maduro es asignado a cuidar del nuevo hermanos por un período de tiempo como de uno o dos años, para que el nuevo hermano pueda formar buenos hábitos y buenas relaciones con otros cristianos lo antes posible.

3. Debe de ser de la misma edad y sexo, interés social para formar una amistad profunda, tanto dentro como fuera de la iglesia.

4. Es su deber introducirlo a los otros miembros de la iglesia y hacerlo sentir como parte del grupo.

5. Debe orientarlo y felicitarlo por la más mínima mejora.

6. Debe envolverlo en la obra de la iglesia.

7. Darle ejemplo en todo.

8. Averiguar sus necesidades

9. Enseñarle cómo contestar a sus amistades no cristianas cuando le preguntan a cuál iglesia va.

10. Explicarle como puede ganar a otros.

11. Averiguar por qué está ausente cuando falte a los cultos de la iglesia y las clases bíblicas. Debe asegurar que su nombre figura en el informe de la asistencia semanal de la iglesia.

12. Escribirles cartas

13. Invitarlo a comer.

14. Sentarse al lado en el culto.

VI. CONSERVACION INMEDIATA

A. Hay que conseguirle de inmediato todos los materiales arriba mencionados, darle los teléfonos de los hermanos de la iglesia, preguntar si necesita transportación para el próximo culto de la iglesia que sería el día tal a la hora tal.

B. A los siete días hay que volver a tener contacto con el nuevo hermano, especialmente si no asistió a los cultos de la iglesia para ver cuál sea su necesidad y cómo podemos animarlo. El interés y la preocupación son muy importantes. Antes de irse, digamos, "Vamos a orar".

C. Como mensaje, hay que comunicarle lo siguiente:

1. Ponemos las cosas de Dios en primer lugar (Mat. 6:33).

2. Cristo está en los cultos de la iglesia (Mat. 18:20).

3. Cristo nos añadió a su iglesia (Hech. 2:47). Hay que ser fiel donde Cristo nos puso.

4. Los primeros cristianos "perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones" (Hech. 2:42).

5. Cristo nos mandó a conmemorar su muerte por participar de la Cena, cada primer día de la semana (Mat. 26:26-29; Hech. 20:7).

D. De manera inmediata, debe sentir el compañerismo de la iglesia, que él es valioso e importante. Tal vez se puede organizar un culto en su casa lo antes posible para reforzar su nueva relación los hermanos de la iglesia y tener la oportunidad de relacionarse.

III. LOS LIDERES Y EL NUEVO MIEMBRO

A. Los líderes de la iglesia deben de considerar al nuevo hermano usando las siguientes preguntas:

1. ¿Cómo podemos servir a este nuevo hermano?

2. ¿Cómo podemos ser más efectivos en convertir a otros?

3. ¿Qué errores hemos cometido con este nuevo hermano?

4. ¿Cuáles son sus necesidades especiales?

B. Orar por el nuevo hermano.

C. Llamarlo por teléfono, especialmente el sábado.

D. Visitarlo.

E. Ayudarlo a orar por si

F. Asignarle un amigo o grupo de apoyo si todavía no lo tiene.

G. Darle un trabajo en la iglesia lo antes posible, para que pueda cooperar con la iglesia y ser funcional.

IV. LA CONVERSION LENTA

A. Algunos progresan muy lentamente y se pueden convertir, pero van a echar varios años. Hay que conservar el trabajo ya hecho para darles seguimiento. Muchos de éstos son más fieles en asistir a la iglesia que muchos hermanos y a veces los tratamos igual a los hermanos en todo, pero de vez en cuando, les damos un toque especial para sondearlos, a ver qué tan cerca están de tomar la decisión de bautizarse. Hay que tener paciencia para esperarlos. Conozco algunos que se echaron cinco años. Mientras hay progreso, estamos en el deber de cultivarlos.

B. Uno lo expresó así: "Lo que la mente atienda, considera; lo que no atienda, descarta; y lo que atiende de manera continua, lo cree y, a lo largo, lo hace". Muchos obedecen a Cristo porque conservamos su atención puesta en su relación a él.

V. LA CONVERSION LIMITADA

A. Sucede que un gran número de personas solicitan y reciben el bautismo pero realmente no disfrutan de un entendimiento completo o maduro. No podemos juzgar, muchas veces, la capacidad espiritual de cada solicitante, sea adulto o niño, y preferimos errar por el lado de presumir entendimiento, que errar por el lado de obstaculizar la obediencia a Cristo. Debido a la posibilidad de que la conversión de algunos fue limitada, debemos reforzar la conversión después.

B. Algunos abandonan la iglesia sin nunca haber sido convertidos y otros permanecen en la iglesia, pero tampoco dan señal de conversión. Posiblemente el bautismo era un cambio de clasificación, obligada por la presión de otros miembros, en vez de un nacimiento espiritual. A veces se crian en la iglesia y no llevan el sentido de un gran cambio de vida como acompaña la conversión de un verdadero mundano. Lejos de criticar a los que se convierten después de criarse en la iglesia o insinuar que deben probar la vida mundana para poder convertirse, nos toca enfatizar la verdad de su conversión, que sí hubo un cambio verdadero.

C. Los hijos que se crian en la iglesia se pierden cuando llegan a la edad en que son responsables de sus hechos. Cometen pecados de mentir, codiciar, desobedecer a los padres y estos pecados merecen la muerte igual como si fueran adulterar o matar. Al cometer estos pecados, son hijos del diablo aunque le piden perdón a Dios, porque Dios no le puede perdonar sin aplicarse para sí la sangre de Jesucristo por medio del bautismo bíblico. A una edad muy tierna, han ganado un lugar en el infierno si no se arrepientan. Tratarlos como a santos es criarles una idea equivocada.

D. Los menores de diez años realmente no comprenden conceptos abstractos teológicos que conlleva una conversión Si acaso juzgamos que un niño no sea apto para bautizarse, que es prematuro, debemos felicitar su motivación sana y proveerle un medio alterno para expresar su fe, cosa que la experiencia no sea una derrota sino un paso adelante.

E. Existen también adultos que llegaron muy rápido al bautizarse sin recibir una instrucción completa. Tampoco queremos posponer el bautismo de éstos, sino asegurar que más adelante entienden lo que ocurrió cuando fueron convertidos. Sin este seguimiento, se puede perder lo ya logrado.

F. No se debe comunicar la idea que ya acabamos con eso del bautismo, sino les toca a los maestros de la iglesia seguir enseñando sobre la conversión para el beneficio de los convertidos.

BIBLIOGRAFIA

Kennedy, D. James, Evangelismo Explosivo, Evangelism Explosion III, Fort Lauderdale, Florida, 1970

Stewart, Ivan, Go Ye Means Go Me, Ivan Stewart, Oklahoma City, Oklahoma, 1974

Sweet, Albert, The Personal Worker, R.B. Sweet Co. Inc, Austin, Texas, 1965

Disciples In The Making, Church Growth, Pasadena, California, 1984

Bales, Norman L., Meeting Informational Needs of the New Christians, Christian Bible Teacher, agosto, 1983, pág. 314-315

Bales, Norman L., The Need of Establishing Meaningful Relationships, Christian Bible Teacher, julio, 1983, pág. 270-271

Goad, Steven Clark, Post-Conversion Care: Keeping the Saved Saved, Firm Foundation, 16 de noviembre, 1976, pág. 724

Levan, Tom, God Has No Grandchildren, Christian Bible Teacher, agosto, 1979, pág. 314-316

Winkler, Wendell, After Baptism, What Am I To Do?, Waymarks, 25 de marzo, 1979, pág. 2

DESPUES DEL BAUTISMO, ¿QUE DEBO HACER?

por Wendell Winkler

1. DEBO ANDAR EN VIDA NUEVA. Siendo "sepultado juntamente con él para muerte por el bautismo...así también nosotros andemos en vida nueva" (Rom. 6:4). La persona nacida de Dios no continua su vieja vida de aquellos pecados que antes le caracterizaba (1 Jn. 3:9; Rom. 6:1-2). Esto se debe a su arrepentimiento genuino (2 Cor. 7:10; Heb. 6:1).

2. DEBO DESEAR LA LECHE ESPIRITUAL NO ADULTERADA. "Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación" (1 Ped. 1:22-23). Esto significa que debe leer, estudiar y meditar en la Palabra eterna de Dios (1 Tim. 4:13, 15; 2 Tim. 2:15).

3. DEBO GLORIFICAR EL NOMBRE DE CRISTO. Aunque padezco como cristiano, debo glorificar a Dios por ello (1 Ped. 4:16). Jamás debo comportarme para avergonzar el nombre santo y alto de Cristo. Alejandro el Grande conquistó el mundo entonces conocido y lloró porque no había más que conquistar. Resulta que había en sus ejércitos un soldado cobarde que también usaba el nombre Alejandro. El general Alejandro lo llamó un día y de forma áspera dijo: "Cambia tu vida o cambia tu nombre". No debemos vivir una vida incorrecta y a la vez llevar el nombre de Cristo.

4. DEBO PERSEVERAR. Los que fueron bautizados en el día de Pentecostés se dice: "Y perseveraban..." (Hech. 2:42). Debo estar firme y constante, creciendo en la obra del Señor siempre (1 Cor. 15:58). No debo estar un día y ausente el otro, prendido y apagado, arriba y abajo, caliente y frío, regular y esporádico, adentro y afuera con la obra del Señor. No podemos cumplir con nuestra misión con una vida inconstante.

5. DEBO BUSCAR LAS COSAS DE ARRIBA. "Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba...Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra" (Col. 2:1-2). El interés y el afecto del Cristiano está en el cielo, junto con el Padre celestial (Mat. 6:9). Allí está su ciudadanía (Fil. 3:20; Heb. 12:23). Nuestro tesoro está en el cielo (Mat. 6:19-21).

6. DEBO HABLAR A OTROS DEL SALVADOR. Cuando Pablo se convirtió, en seguida predicaba a Cristo a otras personas (Hech. 9:20). Cuando Andrés encontró al mesías, buscó a su hermano Pedro y los llevó a Cristo (Jn. 1:40-42). Fuimos salvos para salvar también a otros, convertidos para convertir a otros y hecho discípulos para discipular a otros. "Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros (2 Tim. 2:2).

EL DILEMA DEL NUEVO CRISTIANO

por Lydia Sherman

 

Para descubrir los factores que facilitan el continuo crecimiento de los nuevos cristianos, entrevistamos tanto a los recién convertidos como también los que se apartaron poco después de su conversión. Encontramos lo siguiente:

 

1. El nuevo cristiano necesita amor. Cuando alguno trae un bebé a la iglesia, todos se interesan y cada semana lo miran para ver cómo ha crecido. Un nuevo miembro debe de tratarse como un cristiano nuevo.

 

2. El nuevo cristiano necesita llenar un vacío. Si no se visita y no recibe compañerismo después de su conversión, se va a sentir solo, tentado a volver a su vieja manera de vivir.

 

3. El nuevo cristiano afronta el desánimo. El mejor momento para interesarlo en el trabajo de la iglesia es tan pronto se bautiza. Es cuando más celoso y deseoso está de hacer algo. Ignorarlo puede desanimarlo en gran manera.

 

4. El nuevo cristiano necesita el ejemplo de los cristianos maduros. Es difícil mantenerlo dedicado al trabajo del Señor cuando se da cuenta que muchos miembros no hacen nada.

 

5. El nuevo cristiano no se acopla rápidamente a las cosas espirituales. No está familiarizado con los himnos, ni comprende muy bien el sermón ni sabe buscar textos en la Biblia. Los maduros deben preguntarle cómo le va, si entendió el sermón o lo relacionado a la Cena del Señor o si le gustaría aprender algunos himnos.

 

6. El nuevo cristiano necesita compañerismo cristiano. Hay que incluirlo en las actividades de la iglesia e inventar otras actividades para hacerlo sentir como parte de la familia.

 

Los líderes de la iglesia no son los únicos responsables por el bienestar del nuevo hermano, sino todos. ¿Hasta cuándo hay que ayudarlo? Hasta que haya crecido.

PREGUNTAS

 

 

1. ¿Cuáles son las dos partes de la Gran Comisión?

a.

b.

 

2. ¿Por qué es necesario empezar de inmediato para conservar al recién convertido?.

 

 

 

3. ¿Cuál es el deber del evangelista con el recién convertido?

 

 

 

 

4. Cuáles son los deberes del recién convertido?

 

 

 

 

5. ¿Por qué debe examinarse la iglesia?

 

 

6. ¿Qué indica el capítulo 16 de Romanos?

 

 

7. ¿Cuál es la observación de Flavil Yeakley?

 

 

8. ¿Es correcto posponer el bautismo o poner un recién bautizado en poner un recién bautizado en probatorio?

 

 

9. ¿Qué es un amigo de apoyo?

 

 

 

10. ¿Cómo puede la iglesia ayudar a recién convertido que quiere saber más de la Biblia?.

 

 

 

11. ¿Cuales son algunos mensajes que podemos comunicar al recién convertido?

a.

b.

c.

d.

e.

 

12 ¿Qué puedan hacer los líderes por el recién convertido?

a.

b.

c.

d.

e.

 

12. Favor de completar la expresión: "Lo que la mente atiende, ...

 

 

 

13. ¿Por que un menor de diez años no debe bautizarse, por lo general?

 

 

14. ¿Es necesario vivir una vida mundana para poderse convertirse?

 

 

 

 

15. ¿Qué debemos hacer con aquellos que quieren bautizarse después de una sola clase?

 

 

16. ¿Son pecadores los hijos de miembros de la iglesia que se han criado en la iglesia? ¿Por qué?

 

 

17. ¿Cuáles son las seis cosas que uno debe hacer después de bautizarse?

a.

b.

c.

d.

e.

 

 

18. ¿Cuál es el dilema del nuevo cristiano?