SERIE: LOS HERMANOS QUE PROHIBEN

Lección 3

LA BENEVOLENCIA ES EVANGELISMO

por Jim Massey

Jesús dijo: "Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder ... Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos" (Mateo 5:14). Jesús no hizo ninguna distinción entre buenas obras y motivando a la gente para que glorifiquen a Dios. Para Cristo, las buenas obras son una manera de evangelizar. La benevolencia es evangelismo.

Los hermanos que prohiben legislan (atan) una distinción entre la benevolencia y el evangelismo y con gran cautela tratan de separar los textos de benevolencia de los textos de evangelismo. Dicen que una iglesia puede enviar dinero a otra iglesia para benevolencia pero de ninguna manera puede enviar dinero a otra iglesia para evangelismo. Es un empeño fracazado. A menos que puedan atar la diferencia entre evangelismo y benevolencia, no pueden atar el patrón de ellos de enviar la ayuda directamente al misionero o evangelista extranjero. En las Escrituras, lo que se puede hacer en evangelismo se puede hacer también en benevolencia.

Dios usa la benevolencia como semilla para aumentar "los frutos de vuestra justicia" (2 Corintios 9:10-15). De la ofrenda benévola nace justicia. No justifica a uno delante de Dios, pero conduce a esto. Los apóstoles no ataron una distinción entre evangelismo y benevolencia, sino al contrario la benevolencia era un medio de evangelizar.

Gálatas 6:1-10: "Restauradle" al sorprendido en alguna falta y "sobrellevad los unos las cargas de los otros". No hay forma de separar aquí la actividad espiritual de restaurar a un hermano y ayudar con sus cargas físicas. Cuando cargamos con las necesidades físicas, lo hacemos por razones espirituales.

1 Corintios 16:1-2: "En cuanto a la ofrenda para los santos..." Esta es el único ejemplo de una colecta el primer día de la semana y dicha colecta era para benevolencia. Sin embargo, se les olvida a nuestros hermanos que prohiben sus distinciones entre benevolencia y evangelismo cuando usan este versículo para buscar dinero para pagar sus ministros. Claro que tienen la razón por usar este versículo para toda y cualquiera obra del Señor, pero para hacerlo, tienen que descartar sus distinciones entre lo que bíblicamente se puede hacer en evangelismo y benevolencia. Vamos a dividir la iglesia porque aquí tenemos un patrón exclusivo para benevolencia, y, por lo tanto, (siguiendo esta misma lógica equivocada del anti-ismo) hay que prohibir a las iglesia sacar dinero de la ofenda dominical para pagar a los ministros. Dicen: "En evangelismo las iglesias enviaron dinero de su fondo directamente a evangelistas para apoyar la predicación del evangelio". Esto demuestra (1) que estos hermanos enfatizan la diferencia entre cómo se puede usar el dinero para evangelismo y como se puede usarlo para benevolencia, aunque los apóstoles no hicieron diferencia ninguna. Este dicho del hermano, (2) demuestra que cree que una iglesia puede usar dinero de su fondo para pagar a un evangelista. Pero según su propio patrón sobre la diferencia entre evangelismo y benevolencia, esta práctica sería contrario a las Escrituras porque el único mandato de la ofrenda el primer día de la semana es 1 Corintios 16:1-2, y ESTE VERSICULO TRATA DE BENEVOLENCIA. El primer versículo muestra que era para los "santos" y el tercer versículo muestra que era para enviar a Jerusalén. ¿Cómo pueden los hermanos que prohiben violar su propio argumento por usar un texto de benevolencia para autorizar evangelismo? Hechos 2:45 enseña que vendieron sus propiedades y los repartían según la necesidad de cada uno. Los que vendieron eran los mismos que repartieron. No hubo colecta ni fondo. Así que los hermanos que prohiben tendrán que admitir que la obra del Señor puede llevarse a cabo sin utilizar un fondo común. Ahora tenemos que insistir que ellos se aplican su propia medicina. ¿Será correcto dividir una iglesia por insistir que el fondo según 1 Corintios 16:1-2 era exclusivamente para benevolencia? ¿Cómo es posible que estos hermanos se enredan tanto en su propia mente torcida y buscan debatir un tema cuando la misma lógica que emplean los condena? Pero seguirán insistiendo que 1 Corintios 16:1-2 le autoriza a la iglesia pagar el sueldo de sus ministros, su casa, su cuenta de luz y agua y hasta vacaciones, y, al mismo tiempo, insiste en que un patrón para benevolencia no se puede usar para evangelismo. Cuelan mosquitos y tragan camellos. Buscan pajitas en el ojo ajeno cuando tienen la viga en su propio ojo. Es división y el practicar lo que uno condena es hipocresía.

Según este patrón, un evangelista no podrá usar su automóvil para transportar a un enfermo al hospital porque esto sería tomar los fondos enviados directamente al evangelista para evangelismo y usarlos para benevolencia. ¡Qué pecado! Los ministros usan su automóvil para benevolencia, para evangelismo y simultáneamente para ambos propósitos. No hay tal distinción. En el caso de pagar a un ministro con fondos autorizados por un texto para benevolencia, atan distinciones que ellos mismo no cumplen.

Hechos 11:29: "Entonces los discípulos, cada uno conforme a los que tenía, determinaron enviar socorro a los hermanos que habitaban en Judea." Aquí enviaron dinero a los ancianos para ayudar a los necesitados, pero los hermanos que prohiben niegan que se puede enviar dinero a los ancianos para un evangelista. Atan restricciones por una distinción entre evangelismo y benevolencia que la Biblia no ata.

Hechos 11:30: "Lo cual en efecto hicieron, enviándolo a los ancianos por mano de Bernabé y de Saulo". La Biblia no especifica cuáles son estos ancianos, si son de Judéa o si son de Jerusalén. Volveremos a estudiar este punto más adelante porque si los ancianos eran de Jerusalén, entonces este es un ejemplo de una iglesia enviando dinero a otra iglesia para entonces repartir a hermanos en varias iglesias. Sin embargo, aunque eran ancianos de las iglesia de Judéa, cosa que no pueden probar, todavía enseñan que una iglesia (Antioquía) puede enviar dinero a otra iglesia (las de Judéa) para que su ancianos puedan distribuirlo entre sus miembros. Esto significa que una iglesia puede enviar dinero a otra iglesia para que los ancianos lo reparten a los miembros necesitados. Pero cada miembro debe evangelizar según Marcos 16:15. ¡Qué absurdo! Enviar dinero para benevolencia es permitido, y enviar dinero para evangelizar es prohibido.

Esta oposición también ilustra cuan importante le es esta distinción forzada y ridícula entre "patrón de evangelismo" y "patrón de benevolencia". Este presumida distinción prohibe que un evangelista sea un santo necesitado, y prohibe que un santo necesitado sea un evangelista. Si un evangelista que recibe su apoyo según el patrón de evangelismo llega a ser necesitado, no podrá usar los fondos de patrón de pago directo al evangelista; y si un santo necesitado recibiera dinero del patrón de benevolencia y predicara a la vez, estará quebrantando el patrón de benevolencia. ¿Cómo es posible que haya quién traiga estas razonamientos necias de mentalidades legalistas.

Prohiben que una iglesia envíe dinero, tratados, ni siguiera un Nuevo Testamento a otra iglesia para evangelismo. Según Hechos 15:23, la iglesia en Jerusalén envió a la iglesia de Siria y Cilicia una carta espiritual que iba a resultar en evangelismo. Según el anti-ismo, una iglesia no puede ayudar a otra iglesia pagar por su edificio ya que los edificios se usan para evangelismo. Tampoco puede prestar sillas, ni himnarios, sin embargo, con la misma lógica, ¡¡¡puede enviar un evangelista!!! Además, la iglesia en Jerusalén envió a varios predicadores a la iglesias de Siria y Cilicia (Hechos 15:22-35), pero según el anti-ismo puede enviar un predicador, pero no puede dar dinero para pagar un evangelista; puede pagar para enviarles un sermón hablado, pero no mandar dinero para que compren un sermón escrito (tratados). ¿No suena ésto como colar un mosquito y tragar un caballo? Jesús condenaba estas distinciones ridículas en Mateo 23:16-22. Cuando los legalistas hacían distinciones ridículas, Cristo los llamaba insensatos y ciegos (Mateo 23:17).

NO PUEDEN ATAR QUE LOS ANCIANOS ERAN DE JUDEA

Los hermanos que prohiben se ven obligados a demostrar que los "ancianos" en Hechos 11:30 sean de las diferentes iglesias de Judéa. Esto es una factor clave para ellos para probar su reclamo que una iglesia no puede enviar dinero a una segunda iglesia para los miembros necesitados de una tercera iglesia. Prohiben que una iglesia reciba dinero para ayudar a otras iglesias. Pero a menos que ellos pueden probar que la iglesia en Antioquía envió dinero directamente a cada iglesia de Judea en particular, no pueden prohibir a las iglesias que desean cooperar con programas como el Heraldo de la Verdad o evangelismo por una iglesia que supervisa, facilita o patrocina.

De haber una duda razonable de que dichos "ancianos" de Hechos 11:30 fuesen los ancianos de las diferentes iglesias de Judea, queda ahorcado el patrón de los hermanos que prohiben como sólo una teoría o opinión. Ciertamente no se puede dividir la iglesia del Señor a base de una opinión. El presente estudio tiene por meta probar que los ancianos mencionados eran los ancianos de Jerusalén, es decir, que Antioquía envió el dinero a los ancianos de Jerusalén, una iglesia patrocinadora, la cual repartió el dinero a las diferentes iglesias de Judéa.

1. No lo dice. Los hermanos que prohiben no pueden probar que dichos ancianos de Hechos 11:30 eran de las diferentes iglesias de Judéa porque no lo dice. Su patrón es sólo una especulación.

2. La iglesia de Jerusalén envió a Pedro y a Juan a Samaria (Hechos 8:14). Quede demostrado que esta iglesia, la de Jerusalén, se preocupaba por las necesidades de las iglesias a su alrededor. No creyeron que estaban invadiendo el territorio o la autonomía de otra iglesia cuando enviaron personas para ayudar de manera espiritual a los miembros de la iglesia en Samaria

3. La iglesia en Jerusalén ayudaba constantemente a las iglesias necesitadas dondequiera que se encontraban. La iglesia de Jerusalén envió, de manera oficial, a Bernabé a Antioquía (Hechos 11:22). La palabra "enviar" en el griego lleva el significado de un envio oficial o comisionado. La iglesia en Jerusalén envió como su representante a Bernabé a la iglesia en Antioquía para alimentarles en lo espiritual. Al autonomía de la iglesia en Antioquía no fue violada. No tenía un territorio para guardar contra intrusos.

4. La iglesia en Jerusalén envió a cuatro predicadores a Siria, Antioquía y Cilicia (Hechos 15:22). Evidentemente la iglesia en Jerusalén era muy preocupaba por las demás iglesias. No era control ni patrocinio centralizado ni se violaba la autonomía.

5. Profetas fueron enviados de Jerusalén debido al hambre (Hechos 11:27). La preocupación de la iglesia en Jerusalén por las demás iglesias de Judea se evidencia nuevamente por el envio de los profetas de Jerusalén a Antioquía, para animar a Antioquía para ayudar a todos los cristianos necesitados por toda Judea. Sería de esperarse que el fondo fuera enviado a Jesusalén para de allí repartirse.

6. Pablo y Bernabé regresaron de Jerusalén cuando habían cumplido su misión (Hechos 12:25). Después de llevar el dinero de Antioquía, estos hombre regresaron de Jerusalén. La Biblia nada dice que fueron a ningún otro lado que no fuera Jerusalén. De que fueron a visitar a todas las iglesias de Judea es sólo una especulación que no pueden probar, ni usar como base para un patrón obligado. Cuando terminaron su misión, regresaron de Jerusalén. Los hermanos que prohiben especulan que aministraban también fuera de Jerusalén.

7. La palabra "ancianos" en Hechos casi siempre se refiere a los ancianos de Jerusalén (Hechos 15:2,4,6,22; 16:4; 21:18). Eran muy conocidos por su amor por las demás iglesias de Judéa.

8. Hechos 15:23 no especifica "de Jerusalén" al refirise a los ancianos. Esto es muy significativo. De no haber que decir, "de Jerusalén" indica que todos entendían de dónde eran. Tan común que la carta de los ancianos de Jerusalén simplemente decía "ancianos", asegurados de que todos entenderían.

9. Pablo era desconocido en Judéa hasta la reunión de Hechos 15. "Y no era conocido de vista a las iglesias de Judea, que eran en Cristo" (Gálatas 1:22). Pablo no entregó la ofrenda directamente a manos de los ancianos de las iglesias de Judea sino a los ancianos de Jerusalén, por cuanto, como afirma aquí, que era desconocido en Judéa hasta la reunión de Hechos 15. Pablo no usó el simple, "No me conocieron", sino insiste que "era" desconocido, construcción más enfática en el griego. La misma expresión griego que se usa en Hechos 2:42 para decir, "Perseveraron" indicando acción continuada. El argumento de Pablo depende de haber sido desconocido y haber permanecido desconocido hasta Hechos 15.

10. "Solamente oían decir: Aquél que en otro tiempo nos perseguía, ahora predica la fe que en otro tiempo asolaba" (Gálatas 1:23). La expresión "oían" significa, no que "oyeron", sino que continuaron oyendo (sin verlo en persona) hasta la reunión de Hechos 15.

11. "Después, pasados catorce años, subí otra vez a Jerusalén con Bernabé, llevando también conmigo a Tito" (Gálatas 2:1). La palabra "después" o "entonces" indica que este fue el momento cuando dejaron de "oír" y dejó de ser desconocido.

En otras palabras, los sucesos de Hechos 11:27-30 sucedieron cuando Pablo llevó el dinero a los ancianos y regresó de Jerusalén, y después los de Judéa todavía no conocían a Pablo. ¿En qué cabeza cabe que Pablo llevó el dinero de Hechos 11:27-30 directamente a los ancianos de Judéa?

SON SOLO ESPECULACIONES

(1) La "iglesia" de Antioquía envió ayuda. No es correcto, porque el texto simplemente dice que los "discípulos" enviaron y acuérdese que los hermanos que prohiben hacen gran diferencia entre lo que hace la iglesia y lo que hace un individuo.

(2) Las iglesias de Judea tenían ancianos. No es correcto, porque no lo pueden probar. Hechos 14:23 no lo prueba y ni lo afirma ninguna Escritura. Los hermanos que prohiben construyeron su supuesto patrón en meras especulaciones.

(3) Pablo llevó el dinero directamente a los ancianos de Judea. No es correcto. Toda la evidencia es que el dinero fue llevado a los ancianos de Jerusalén. Estos fueron los ancianos que hicieron el pedido a Antioquía, no los supuestos ancianos de Judea. Los ancianos de Jerusalén eran conocidos por su preocupación por las demás iglesias y ellos, mejor que Pablo y Bernabé, conocían la condición de las iglesias de Judea.

(4) El dinero para la benevolencia es diferente del dinero para el evangelismo. No es correcto, porque la Biblia no hace tal discriminación entre un supuesto patrón de benevolencia y patrón para el uso de dinero para evangelización. Parte del dinero de esta ofrenda llegó a alimentar a predicadores en Judea y predicaron con más ánimo al ver el amor de sus hermanos en Antioquía. Estos dos partes de la obras están interdependientes, los dos funcionan a la vez y se ayudan mutuamente.